En Eucaristía de bienvenida a la Santísima Virgen María en la Parroquia Nuestra Señora de Fátima de Santiago de Chile, Cecilia Bolocco y su hijo Máximo expresaron su devoción a Nuestra Señora del Rosario.

Recibida por miles de feligreses que la esperaban en el barrio Independencia de Santiago, regresó a Santiago este 23 de septiembre la Imagen Oficial de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, luego de peregrinar avivando la fe durante una semana por la diócesis de Arica.

En la Parroquia de su mismo nombre –Nuestra Señora de Fátima– se vivió desde las 20 horas una emotiva eucaristía, presidida por el sacerdote Rafael Ramírez, iniciando así la peregrinación de siete días por la Arquidiócesis de Santiago, cuyo variopinto recorrido se puede conocer pulsando aquí.

La celebración tuvo momentos muy emotivos que los fieles seguían atentamente. Mientras, en una de las naves laterales del templo, se pudo ver a dos personas que oraban y daban gracias con evidente fervor. Eran Cecilia Bolocco, la reconocida empresaria de modas y ex Miss Universo, junto a su hijo Máximo Menem Bolocco.

Para ellos Nuestra Señora de Fátima ha sido medular en la recuperación de Máximo, desde que el joven a los 14 años fuese diagnosticado de un tumor cerebral. Su madre, Cecilia, católica y devota de la Virgen, se confió a la Santísima Virgen pidiendo cadenas de oración por la recuperación de su hijo.

Luego de que participaran de la Eucaristía, en conversación con Misión Fátima Chile, Cecilia Bolocco compartió su alegría y gratitud a la Madre de Dios: “Es una bendición para todo el país y para todos quienes nos hemos abrigado con su manto en los momentos de dolor”, señaló.

Luego, reafirmó que la fe y devoción mariana es una experiencia cotidiana en su vida, como en la de su hijo Máximo: “Le hemos rezado siempre y sobre todo en los momentos más complejos. Estamos muy agradecidos por todo el amor y apoyo que nos ha brindado”.

Al finalizar la Eucaristía en la Parroquia Nuestra Señora de Fátima de Independencia, aunque por el horario Máximo debía regresar a su hogar para la ingesta de una de sus medicinas, se dio tiempo para acariciar los pies de la Imagen de Nuestra Señora de Fátima. A pocos metros, arropada por el cariño de los fieles que la rodeaban y abrazaban, Cecilia Bolocco contemplaba con evidente emoción aquel signo de fe, devocional, de su hijo.